Somos seres electromagnéticos, con modelos de frecuencia que tienen resonancia por lo que cierto tipo de energías nos son perjudiciales, nacimos con un patrón energético o patrón de luz que al cabo de los años se va modificando. Por ejemplo nos damos cuenta que ya no tenemos la misma vitalidad, empuje, extroversión de hace años. No es vejez, es un patrón que se modificó por algún evento, sustancia, persona, energía o circunstancia, incluso causada por la memoria de un daño físico, afectivo o emocional sin tener un proceso de sanación.
Una fuga de energía es como una tubería perforada o fisura donde se escapan nuestros recursos elementales como la alegría, vitalidad, placer, amor, dinero, felicidad, vida; y puede dar lugar al establecimiento de síntomas o enfermedades persistentes en cualquier parte del organismo y se produce cuando el individuo deja escapar su energía por articulaciones, espalda u órganos, en vez de dejarla fluir por las extremidades: Pies, manos, órganos sexuales y de desecho. Es decir, todo esto tiene una repercusión física emocional, mental, espiritual y puede darse a través de bloqueos que generan presión, asfixia, toxicidad y estancamiento sobre órganos o partes del cuerpo provocando inflamación, debilidad, mal funcionamiento.
Cuando hay un bloqueo no siempre puede provocar fisuras de energía, pero si un debilitamiento o poco abastecimiento de energía y nos vamos debilitando constantemente. “El estado emocional de una persona puede verse como la proyección de sus desequilibrios estructurales” –Ida Rolf-
Las emociones de baja frecuencia tienden a ser debilitadoras pero cuando se mantienen por mucho tiempo enquistan y se vuelve una fuga de energía, porque para mantener una emoción se requiere de energía vital.
Por procesos inflamatorios e irritabilidad en amígdalas, adenoides, sinusitis, hepatitis, cistitis, meningitis, apendicitis, bronquitis, etc. Un ejemplo claro es vivir en un lugar donde te sientes enojado con pérdida de poder o terreno, donde exista alguien que te quite espacio, dando como resultado una fuga en las adrenales o riñones y repercutiendo en sistema reproductivo o urinario: miomas, cistitis, quistes, tumores, infecciones urinarias frecuentes por necesidad inconsciente de querer marcar terreno y recuperar poder o control.
https://mx.ivoox.com/es/meditacion-para-eliminar-bloqueo-algun-organo-audios-mp3_rf_2949135_1.html
ResponderBorrarSomos seres electromagnéticos, con modelos de frecuencia que tienen resonancia por lo que cierto tipo de energías nos son perjudiciales, nacimos con un patrón energético o patrón de luz que al cabo de los años se va modificando. Por ejemplo nos damos cuenta que ya no tenemos la misma vitalidad, empuje, extroversión de hace años. No es vejez, es un patrón que se modificó por algún evento, sustancia, persona, energía o circunstancia, incluso causada por la memoria de un daño físico, afectivo o emocional sin tener un proceso de sanación.
Una fuga de energía es como una tubería perforada o fisura donde se escapan nuestros recursos elementales como la alegría, vitalidad, placer, amor, dinero, felicidad, vida; y puede dar lugar al establecimiento de síntomas o enfermedades persistentes en cualquier parte del organismo y se produce cuando el individuo deja escapar su energía por articulaciones, espalda u órganos, en vez de dejarla fluir por las extremidades: Pies, manos, órganos sexuales y de desecho. Es decir, todo esto tiene una repercusión física emocional, mental, espiritual y puede darse a través de bloqueos que generan presión, asfixia, toxicidad y estancamiento sobre órganos o partes del cuerpo provocando inflamación, debilidad, mal funcionamiento.
Cuando hay un bloqueo no siempre puede provocar fisuras de energía, pero si un debilitamiento o poco abastecimiento de energía y nos vamos debilitando constantemente. “El estado emocional de una persona puede verse como la proyección de sus desequilibrios estructurales” –Ida Rolf-
Las emociones de baja frecuencia tienden a ser debilitadoras pero cuando se mantienen por mucho tiempo enquistan y se vuelve una fuga de energía, porque para mantener una emoción se requiere de energía vital.
Por procesos inflamatorios e irritabilidad en amígdalas, adenoides, sinusitis, hepatitis, cistitis, meningitis, apendicitis, bronquitis, etc. Un ejemplo claro es vivir en un lugar donde te sientes enojado con pérdida de poder o terreno, donde exista alguien que te quite espacio, dando como resultado una fuga en las adrenales o riñones y repercutiendo en sistema reproductivo o urinario: miomas, cistitis, quistes, tumores, infecciones urinarias frecuentes por necesidad inconsciente de querer marcar terreno y recuperar poder o control.